«La ingrata conducta del pueblo catalán…» · ELPAÍS.com
«La catalanofobia tiene una larga historia en España», dice el articulista. Y para eso cita a cuatro elementos y hace historia. Seguro que si me pongo encuentro 25 insultadores de los gallegos, otros tantos de los asturianos y de los castellanos y así hasta el infinito y más allá. Luego podemos hacer un torneo del que se lame más heridas y sorbe más lágrimas.
Lo que no sé es qué podemos hacer acto seguido.
28/07/2009 a las 16:08
Si, yo en los medios de comunicación (prensa, radio y televisión) veo todos los días como insultan a gallegos, asturianos y castellanos, además de a ceutíes o melillenses entre otros. También veo como les llaman insolidarios, como les hacen boicots comerciales y como les tachan de egoístas ¿Por cierto dichas autonomías son de las cinco primeras en aportar dinero al resto del Estado?
¿Qué se puede hacer acto seguido? dejar las calumnias y los insultos que atacan a toda una parte de España a un lado (me refiero a la parte de España que sigue siendo Cataluña) y tratar de evitar tensiones innecesarias.
28/07/2009 a las 20:54
REGIONALISMO
Para que te exaltes, castellano,
hombre seco, hombre de tierra.
Para que me odies, catalán,
más fenicio que de Grecia;
y tú, manchego retardado,
cazurro de alma plebeya;
isleño cursi y rastacuero,
balear ladrón, hijo de chueta;
leonés rencoroso y zafio;
montañes vano, hombre de cera;
y tú, aragonés que llamas
a la bestialidad franqueza;
para que me mates, levantino,
simulador de arte y de belleza;
vasco hipocrita y ambicioso,
insultame con tu pobre lengua;
asturiano traidor y falso;
gallego llorón, y sin vertebras;
murciano sucio, feo y torpe;
extremeño de las cavernas;
madrileño que de Real orden
eres tonto por dentro y por fuera.
Yo os desprecio, os maldigo y os odio,
gentes cobardes de mi tierra.
Y para ti, andaluz idiota,
¡culebra!, ¡culebra!, ¡culebra!
Francisco Vighi 1920
04/08/2009 a las 23:55
Es que los contenciosos entre pueblos, ciudades y regiones siempre han existido en España. Pero una cosa son los agravios comparativos o el que un grupo de personas de un pueblo, ciudad o región inste la independencia política, por ejemplo, y otra cosa muy diferente es la nefasta ideología nacionalista, que en España ha encontrado acomodo disimuladamente. La ideología nacionalista es perversa porque antepone supuestos derechos de territorios, lenguas o razas a los derechos individuales. Es increíble que en una supuesta democracia se permita la existencia de partidos nacionalistas, que por definición, son antidemocráticos.
06/08/2009 a las 10:17
¿Eso vale también para los nacionalistas españoles? Que existen, lo que pasa que nadie (o casi nadie) admite que existen porque sería una contradicción criticar a los nacionalismos «periféricos» y decir que se es nacionalista español.
¿Es antidemocrático reclamar mejoras para tu propia región? Creo que la visión que muchos tienen de España es diferente a la realidad, cada vez lo veo más claro.