La Comunidad » El Patio del Congreso » Excomulgados y herejes del mundo….. – ELPAÍS.com
– La Conferencia Episcopal me ha declarado excomulgado y hereje. Y no me importa.
Esto empieza a parecerse a lo de Saramago. Hay gente a la que le encanta ser excomulgada públicamente. Sobre todo porque no implica ningún gasto económico ni la pérdida de honores o prebendas. Ayer y hoy en el Congreso todos los políticos han respondido ante una presunta excomunión de Martínez Camino. Todos los políticos y todos los periodistas son los primeros en ponerse el galón de excomulgados o de escandalizarse más o menos artificialmente con Martínez Camino porque la amenaza de excomunión -inexistente, imaginada, publicada y embrollada por los medios- es el tema del día.
No, Fernando Garea, no ha sido excomulgado. Negar la comunión a un pecador público no implica su excomunión, que es una pena canónica, que sólo puede levantar un obispo o alguien autorizado por él y que está reservada, en el caso del aborto, a los cooperadores directos con un aborto. Es más, Martínez Camino lo dijo textualmente en la conferencia a la que usted hace referencia:
«Quien está en situación de pecado público no puede ser admitido a la Sagrada Comunión. ¿Está excomulgado? No, no por eso sólo. La excomunión es para los cooperadores directos y necesarios de un aborto efectivamente realizado».
Negar la comunión a un pecador público no es ninguna pena canónica, es lo que hacen los sacerdotes cuando alguien se acerca a comulgar en un iglesia y el sujeto es un pecador público; es decir, que de todos es conocido que ha hecho algo contrario a la Ley de Dios sin arrepentirse. Es para evitar el escándalo.
De modo que si usted no va a comulgar, el mensaje de Martínez Camino no va con usted. Y usted no está excomulgado.
13/11/2009 a las 14:41
Hola Maty
Pero acto seguido añadió, también según la misma noticia de La Razón:
Más aún, según declaró, no sólo quedan excomulgados los colaboradores necesarios en un aborto sino también los que proclaman de manera pertinaz que «es lícito quitar la vida a un ser humano inocente», porque enseñan una herejía, «contraria a la fe divina y católica».
No sé si votar a favor de una ley que declara lícito un comportamiento es más o menos grave que «proclamar de manera pertinaz» que ese comportamiento es lícito. A mí me parece que podría ser hasta más grave, ¿no? Con lo cual no tengo nada claro, la verdad, que en las palabras de Martínez Camino no haya implícita una amenaza de excomunión también para los que voten a favor de la ley.
Lo cual, por otra parte, me parece perfectamente lítico y coherente con la doctrina de la Iglesia. Lo que choca es que haya gente que se escandalice de eso.