A veces tengo la sensación de ser una especie de profeta en el desierto, de esas personas aventadas que ven catástrofes donde la mayoría ven un plácido paisaje. Menos mal que hay otras ojos más autorizados que los míos que ven esa catástrofe.

El primer vigía autorizado es un hombre de los que antes trabajaban en los medios de comunicación: cultísimo, humano hasta el desgarro, curioso pero siempre compasivo. El loco de la colina, Jesús Quintero, fue al programa Carne Cruda de la Cadena Ser hace casi un año. Podéis escuchar la entrevista, de más de una hora, en este enlace.

La entrevista es una clase magistral de radio, en el sentido hondo de la palabra, así que escucharla entera es casi un deber para todos los amantes de ese medio. No obstante, he escogido los minutos finales de la entrevista que son de una intensidad enorme. Sólo con palabras y silencios, estos dos hombres superan por su calidad toda la basura que ha emitido en prime time la TV en el último año.

Solo dos voces y sus silencios, alguna canción y el mundo de apariencias de la tele salta por los aires.


El otro, no tan loco sino más chato, es Paco González, que hizo un papelón el 13-M de 2004.

Dice:
¿El deporte es el verdadero opio del pueblo?

Yo creo que es más la política, fíjate. Me da esa sensación por cómo veo que se maneja la televisión. Hubo un tiempo que fue la prensa rosa, y ahora tengo la impresión de que la política lo invade todo mucho más.